La previsión del tiempo amenaza con endurecer el Triatlón de Salamanca en el que participarán más de 300 deportistas

Este domingo, a partir de las 8.00 horas en las inmediaciones del emblemático puente de Enrique Estevan y en aguas del Tormes, comenzará la VI edición del Triatlón de Media Distancia de Salamanca. La celebración de esta prueba después de la pandemia supone una gran noticia para el deporte salmantino también a nivel de espectáculo e incluso para la ciudad en general, que vuelve a posicionarse, adicionalmente, como un destino turístico a nivel deportivo. No obstante, participarán algo más de 300 deportistas repartidos en distancia olímpica y de media, llegados en buena parte de fuera de Castilla y León. Y es que la cita forma parte del ranking nacional de la especialidad, acoge el Campeonato de Castilla y León de la distancia y forma parte del ranking autonómico de clubes. Muchos aspectos en juego, sin obviar el del prestigio, pues se trata de una prueba que en los últimos años ha albergado campeonatos importantes, incluido el Campeonato Ibérico y el Campeonato de España. Por si fuera poco, al alto nivel competitivo que se presupone, la amenaza de la lluvia según los pronósticos del tiempo, podría endurecer más si cabe la competición de casi cuatro horas de duración.

En cuanto al plan de la jornada, en primer lugar, espera un emotivo minuto de silencio a dos triatletas fallecidos durante la pandemia y participantes de la prueba como Diego Paredes y Oliver Hernández. A continuación, se iniciará la prueba olímpica, con 1.500 metros de natación, 40 kilómetros de ciclismo y 10 kilómetros de carrera a pie. Apenas unos minutos después llegará el turno de la Media Distancia, con circuitos similares, pero distancias de 1.900 metros a nado, 83 kilómetros de ciclismo y 21 kilómetros finales a pie. Cabe recordar que el segmento ciclista no permite ir a rueda entre corredores, es decir, sin ‘drafting’, lo que premia a los más fuertes sobre ruedas. Todo el triatlón discurre en la ribera del Tormes, a excepción del ciclismo que pone rumbo a la DSA-310.

A priori, todas las competiciones se presentan muy abiertas y sin claros favoritos, aunque quizá el Campeonato de Castilla y León se sale en cierto modo de esta tendencia, y es que, en la prueba femenina, participará Marta Gómez Garrote, quien atesora los dos últimos entorchados logrados en Medina de Rioseco y el Bierzo, buscando la triple corona en Salamanca. No obstante, tratarán de impedirlo deportistas con experiencia y todoterreno como Amalia Grobas o triatletas como Inés Antón y Carolina Laurentiu (21ª en el último Nacional), y que, en algunos casos, conocen bien el terreno que pisan. En cambio, no estará en la línea de salida ninguno de los últimos ganadores de la prueba regional masculina, lo que de nuevo dificulta hacer pronósticos.

Más allá de cualquier pronóstico, siempre complicado, cabe destacar, por el palmarés de la prueba, la participación de dos ganadores de ediciones anteriores. En la cita femenina, participará Esther Leal, quien se apuntó la edición de 2017 mientras que en hombres tomará la salida el salmantino Alberto Bravo, campeón en 2015, ambos, por su condición de vencedores y conocedores de la prueba, también serán dos rivales a batir por el pelotón.