Almaty, una de las estrellas turísticas de Kazajistán

Miguel Rodero | Si eres de los que buscas abrir destinos saliendote de la carta comercial que nos ofrecen los turoperadores, o simplemente estas cansado de pisar lugares masificados que ya tienes la sensación de conocer incluso antes de pisarlos, puede que una visita a Kazajistán, y más concretamente a la región de Almaty, capital histórica de este país, sea lo que estés necesitando para conocer un mundo diferente.

Amanecer en Almaty

Este sitio, ubicado al sureste del país a las faldas de las montañas Tian Shan, que permanecen cubiertas de nieve buena parte del año, supo ser el principal centro urbano de la nación mientras ésta permaneció dentro de la República Socialista Soviética y hasta 1998.

Aunque perdió su posición de capital en aquel momento, logró consolidarse como un polo turístico excepcional, sin perder de vista tampoco la enorme relevancia social que representa al ser la localidad más poblada del país congregando al 9% de la población total. 

Almaty es una localidad que cuenta con todo lo que podemos pedirle a una gran metrópoli, gracias a su arquitectura moderna que tampoco prescinde de lugares históricos perfectamente conservados, sus museos, las amplias zonas verdes, los espacios comerciales, etc.

Incluso su calidad de vida es tal que, en los últimos años, muchas de las personas más ricas del país se han trasladado a las afueras o zonas rurales, donde construyen grandes mansiones que han terminado de completar la geografía de la región, caracterizada por casas o edificios bajos. 

Si viajas allí, uno de los destinos que de ninguna forma puedes perderte es el pico Talgar, que alcanza los 4.979 metros de altitud, y que ofrece algunas de las mejores panorámicas de la ciudad desde sus muchos miradores a alturas intermedias. Algo similar ocurre con la colina de Kok-Tobe y sus más de 1.100 metros, proponiendo inigualables vistas de la zona y casi rozando 5 lugares increibles que no puedes perderte en Kazajistán. 

Teleférico estación de esquí de Shimbulak

Si prefieres los deportes, y concretamente los deportes de nieve, la estación de esquí de Shimbulak debe ocupar alguna de tus tardes, subiendo a ella gracias al teleférico que lleva al Talgar Pass.

El Parque Panfilov es uno de los lugares de encuentro más habituales ya no sólo de quienes habitan la ciudad sino también un punto de referencia para los turistas que la están conociendo o que pretenden acercarse a la catedral Zenkov. Lo maravilloso de esta construcción de madera es que se levantó en 1904 sin utilizar un sólo clavo. Ahora ha sido renovada y pertenece a la Iglesia ortodoxa.

Catedral Zenkov

El Mercado Verde es otra de las visitas obligadas, sobre todo si nunca en tu vida has pasado por el típico mercado asiático con sus variedades de frutas, frutos secos, quesos, pescados, hierbas medicinales, comidas clásicas del lugar, té y zumos frescos.

Mercado Verde

Si eres amante de lo comercial, los Grandes Almacenes Tsoum o Zanghar, o la zona peatonal de Zhibek Zholy deberían formar parte de tu itinerario. Y si tienes un poco de tiempo libre, desplazarte hacia las afueras, hasta los bazares de Barakholka, bien vale la pena.

La Mezquita Central de Almaty, construida en mármol blanco e inaugurada hace dos décadas, es una de las más grandes y bellas no sólo de Kazajistán sino de todo el continente asiático, y puedes recorrerla cualquier día menos los viernes. 

Éstos son sólo algunos de los innumerables atractivos turísticos que Almaty pone a disposición de quienes la visitan, junto a otros tantos que descubrirás a cada paso por esta increíble ciudad y los enormes atractivos que expone su amplia región de estepa. 

Cañón Charyn, uno de los lugares más espectaculares de la estepa kazaja